sábado, 8 de enero de 2011



Cinco de la mañana de mi primer sabado de enero, afuera no se que sabado es ya.

Que se siente?
Mírate al espejo y descubrir que ni siquiera en la imagen que esta del otro lado puedes tener confianza, por que, quien sabe, según sea la luz y la hora, hasta esta te puede engañar
Que se siente?
Depender de el maldito celular, pensando que la persona que esta del otro lado es tu amiga, y descubrir que solo se están burlando de tus palabras.
Que se siente?
Ser el conejillo de indias o mejor aun, la casa de apuestas de las personas que admiras o que aprecias, observar como es que la gente cuya filosofía de vida no es mas que una pantalla te muerde la lengua y te sonrie. Observar como es que los comentarios como: vive y deja vivir no son mas que un burdo chiste de personas que no saben reir de corazón, pero que si saben llorar por la ciudad para que el mundo entero se compadezca de ellas
Ser el juguete que no es mas que eso. Ser la eterna idiota. La eterna bufon de quienes consideras amigos.
Que las unicas personas que pueden ver algo en ti… sean las que pretenden ser algo mas que una amistad sincera.
Que se siente?
Volver a gritarle al espejo te lo dije una y otra ves… analizar tu vida, y descubrir que aunque el mundo gire mil veces, siempre lo hará en círculos, y la misma historia, en la que tu eres el mismo personaje se vuelve a repetir.
Que se siente?
Tener la firme intención de vengarte y dañar a quien te hace sentir lo que en este momento sientes, pero saber que no pasaras de una intención, por que eres cobarde, por que no sabes vengarte, por que no puedes vengarte, por que aun confías en que las personas no saben hacer las cosas por joder.
Que esa palabra ronde por tu cabeza, y no quieras desecharla, pero que al final de cuentas, solo vaya al bote de la basura. Por que sabes que aunque quieras, realmente no quieres…
Que se siente, publicar en un blog viejo por que este es tu verdadero refugio?

Es como estar atada de manos… al compas de tres palabras, al compas de una mirada, al compas de la misma cancion que mi madre me repitio tantas veces.
-te lo dije
-pero nadie te trae ahí, ´¿verdad?
es como simplemente suspirar y encojerte de hombros ante la desagradable sorpresa de que no te sorprende mas.